Informalidad se ubicó en el 27% y sigue bajando
Uruguay es uno de los mercados laborales más formales
El ministro (I) de Trabajo, Nelson Loustaunau señaló que al cierre del ejercicio 2012 se registró un 27% de informalidad, descendiendo desde el 30% (lugar en el que se ubicaba en 2010). El jerarca destacó que desde el 2005 a la fecha fueron 8 años de continua disminución de la informalidad en Uruguay destacándose especialmente la formalización en el sector doméstico.
En base a los datos sobre actividad laboral de la Encuesta Continua de Hogares del INE, la tasa de informalidad se ubicó en el 27% de la actividad laboral. El ministro interino dijo que en comparación con el resto de los países de la región se observa que Uruguay tiene uno de los mercados laborales más formales, donde la situación regular es de las más exitosas en América Latina.
El jerarca informó a Presidencia que la tasa de formalidad se elevó sustancialmente en el sector del trabajo doméstico (área que registraba un grado de informalidad del 90% antes de las acciones que el Gobierno promueve específicamente para ese sector). Actualmente, la tasa se acerca al 50% y Uruguay registra cifras más altas en comparación con países del primer mundo como Alemania.
“La formalización no deriva en los derechos propiamente laborales, sino todos los derechos de seguridad social: el seguro de salud, seguro de desempleo, las asignaciones familiares, la jubilación”, explicó el ministro interino a la secretaría de comunicación de Presidencia.
Loustaunau, sostuvo que para fomentar y controlar la formalidad laboral el MTSS no actúa solo, sino que se utilizan distintos tipos de políticas coordinadas entre las agencias recaudadoras, como BPS, DGI y DNA entre otras instituciones, las que funcionan con acciones tendientes a lograr una mayor formalización.
El ministro interino de Trabajo, recordó además las tareas inspectivas que realiza el MTSS y el BPS en el verano en las zonas turísticas para controlar la formalidad de los emprendimientos comerciales en materia de derechos laborales.
Loustaunau subrayó que el empleo en Uruguay experimentó un crecimiento mayor en el sector formal que en el informal. “Es decir, que se ha instalado una cultura de lo importante que es que el empleo se desarrolle dentro de la formalidad. El empresario toma en consideración, mucho más que antes, que su desempeño sea dentro de la formalidad. Esto es un cambio cultural trascendente. Es parte de construir una nueva forma de ciudadanía, una ciudadanía responsable. Me parece que la transformación, desde diferentes ángulos, ha alcanzado a los diferentes estratos que integran el sistema de relaciones laborales y cada día más se comprenden los beneficios que otorga la formalidad frente a la informalidad”, reflexionó.