GRANJA
Cunicultores anhelan que haya más de una planta habilitada para la faena
Integrantes de la cooperativa HER y Flia lo consideran el principal obstáculo para negociar con independencia y lograr una rentabilidad adecuada
La existencia de más de una planta habilitada para faenar conejos permitiría mejorar de inmediato la rentabilidad de los cunicultores, indicaron a El Observador Agropecuario los integrantes de la cabaña HER y Flia, que recientemente debutó en las exposiciones de genética con un logro relevante: presentó el mejor macho en la Expo Otoño de la Sociedad Uruguaya de Cunicultores (Sudec), gremial de la Asociación Rural del Uruguay.
Esta cabaña es gestionada por una cooperativa familiar integrada por Javier, Daniel y Marcelo Suárez, Javier Patiño y Santiago Serra, colaborando en las tareas sus compañeras e hijos, por eso el nombre de la cabaña que además tomó el HER de un emprendimiento previo: Huerteros en Red.
Santiago contó que “estamos en Cuchilla Pereira, entre el barrio Abayubá (Montevideo) y Las Piedras (Canelones), trabajamos en el predio de una colaboradora desde los inicios, Josefina Barón, son cinco has donde ella y sus hijas se dedican a cultivos orgánicos”.
“Estamos dedicados a la cría de conejos para carne, no solo con animales de la raza Neocelandés, también de otras razas como Californiana y otras introducidas por el Instituto Nacional de Investigación Agropecuaria y adaptadas a nuestro medio exclusivamente para producciónde carne, como las líneas rosa y verde”, señaló.
En la 71ª Expo Otoño, en la Rural del Prado, esta cooperativa logró una performance de alto nivel, sobresaliendo la obtención del premio al Mejor macho de la exposición. Santiago dijo que “es el primer año en el que exponemos, así que eso es un aliciente para seguir trabajando”.
Estos cooperativistas citan como elementos clave para su progreso “el mantenimiento de la genética y características de las distintas razas y un manejo responsable en alimentación y sanidad, con asesoramiento técnico y visitas de veterinarios especializados”. También “los consejos de miembros de Sudec (la cabaña está registrada con el N° 506) que tienen mucha experiencia y conocimiento”.
Actualmente, indicó, “estamos en medio de un proceso de recambio de planteles, por lo tanto no estamos enviando a faena, pero en un mes lo volveremos a hacer”. Lo hacen a la única planta habilitada por el Instituto Nacional de la Carne, ubicada en San José.
Llegaron a enviar un promedio de 90 kilos de carne por semana, con un promedio de 15 madres en producción de gazapos. En la actualidad “contamos con un plantel de 70 madres, por lo que apuntamos a triplicar el envío, por eso estamos construyendo más galpones y jaulas”.
Hoy reciben es $ 60/kg en pie. Se exige no pasar de 2,5 kg de peso por animal en promedio. El pago se hace a los 15 días de entregados.
“Hoy tenemos que manejar con cuidado las finanzas e ir corrigiendo los gastos tratando de optimizar los recursos”. Por ejemplo en alimentación se utiliza una ración balanceada, por ejemplo de los molinos San José e Intor, “pero en época de cosecha damos alfalfa fresca, que retrasa un poco el engorde, pero como la cultivamos nosotros en el predio logramos reducir algún costo”.
“Hoy la colocación la hace la planta, no nosotros, y al ser ellos los únicos habilitados el precio que recibimos no es el mejor; si logramos que exista otra planta o que solo se nos cobre la faena tendríamos más rentabilidad y más independencia para negociar”.
Destacó luego “las excelentes propiedades de la carne de conejo, proporciona más proteínas, tiene un porcentaje de grasa menor que la de pollo, así como de calorías, es excelente para personas con problemas de colesterol y sobrepeso que no quieran dejar de consumir carne. Y se puede preparar al horno, a la parrilla, a la vinagreta, en escabeche o a la cacerola, hay para todos los gustos”.
Para conocer más sobre esta cooperativa hay que escribir a cabanaheryflia@gmail.com.
Un debut soñado
En la reciente Expo Otoño de Conejos esta cooperativa presentó cuatro animales, dos de la raza neozelandeza y dos californianos. Sus integrantes dijeron estar muy contentos con la participación y los logros, tanto que esperan reiterar la buena experiencia en setiembre, durante la Expo Prado, “si es posible con una mayor presencia”. Señalaron que “el jurado nos felicitó y recibimos consejos sobre cómo seguir mejorando, algo fundamental porque somos debutantes en esto de exponer. Sabemos que el premio que recibimos es parte del esfuerzo en el cuidado, en la selección y también por algo de intuición y suerte que siempre tiene que acompañar”.