En el marco del último convenio colectivo de trabajo, el Sunca y el Plan Juntos firmaron un acuerdo por el cual 900 obreros donarán un día de su trabajo a la semana para colaborar en la construcción de viviendas. Este aporte solidario se vuelca en los primeros meses del año en los barrios Luis Batlle Berres, Cerro y La Cachimba del Piojo.
Silvia Pastorino, arquitecta del Plan Juntos, explicó que “esta iniciativa es muy importante porque es personal calificado que, además de ayudar en la construcción de las viviendas, enseña a los vecinos diferentes técnicas que luego ellos ponen en práctica el resto de los días”.
Agregó, que los vecinos esperan con mucha alegría estas jornadas. Donde no solo participan en las diferentes tareas de construcción sino que intercambian experiencias personales y se generan vínculos, lo que permite que el trabajo, que es muy sacrificado, se realice en un marco de cordialidad y alegría.
Por su parte, Johnny Correa, responsable de la Zonal Oeste del SUNCA (Sindicato Único Nacional de la Construcción y Anexos), señaló que jornadas solidarias de este tipo se vienen realizando informalmente desde hace ya tiempo. “Nos juntábamos los sábados y de allí íbamos para las diferentes obras que estuviera realizando el Plan“, comentó.
“Pero este año tiene un gusto diferente porque, en el Consejo de Salarios, surgió la propuesta, aceptada por todos, que un día a la semana los delegados de obra pudiéramos venir a colaborar con quienes más lo necesitan, pero con el jornal pago. Y de esta manera duplicar nuestra colaboración en todos los rincones del país”, detalló.
Respecto de las jornadas de trabajo, Correa explicó que los vecinos los esperan con mucha alegría, con ganas de trabajar y de aprender. “Trabajamos, charlamos y almorzamos juntos, hacemos un buen equipo”, apuntó.
Añadió que “para nosotros significa lograr un grado de conciencia solidaria muy grande, porque siempre hay gente que necesita del otro para salir adelante, y tener la oportunidad de hacerlo es muy gratificante”.
Para María, una de las vecinas del barrio que trabaja todos los días en la construcción de su casa, esta oportunidad de contar con los afiliados del Sunca es una ayuda y un apoyo muy importante. Es una propuesta espectacular y trabajamos como dice el Plan: todos juntos”.
María rescata no solo el apoyo que bridan los obreros en la tarea de construcción, sino en lo que se genera cada semana cuando ellos participan.
“Venimos de diferentes lugares, somos distintas personas, pero aprendemos a convivir e intercambiar experiencias personales y laborales. Hay mucho sacrificio, pero sentimos que estamos cada vez más cerca de terminar nuestras casas y esto es muy gratificante”, señaló.